El COVID-19 ha perjudicado el bienestar mental y físico de la gente, y son muchos más los que expresan su preocupación por su salud desde el comienzo de la pandemia.
En los mercados avanzados, un tercio de la población encuestada por Swiss Re, declaró un deterioro de su salud mental en los últimos 12 meses.
Este es el tercer año que la reaseguradora realiza una encuesta para estudiar el impacto de la pandemia de COVID-19 en el comportamiento de las personas. Las respuestas muestran que este virus fue un catalizador para que la gente de los mercados emergentes se sometiera a revisiones médicas más regulares, siendo la salud mental una de las principales preocupaciones.
La incidencia de los encuestados que acudieron a un chequeo de salud física como resultado de la pandemia fue tres veces mayor que la de los mercados avanzados.
Más información en la página web de Swiss Re