Una nueva ciberamenzada asoma por 2023, el QRishing. Los códigos QR están formados por módulos bidimensionales compuestos por puntos diferenciados entre sí por colores de un alto contraste (como blanco y negro) en los que se almacena información, tal como señalan desde el Instituto Nacional de Ciberseguridad (INCIBE). Son, además, un tipo de código estandarizado mediante la norma ISO/IEC 18004:2015 y se usan para insertar un enlace a una página web o a la descarga de una aplicación, para la trazabilidad de productos e incluso para acceder al transporte público.
Desde WTW analiza cómo puede afectar este nuevo cibervirus:
- Robo de credenciales,
- Descarga e instalación de malware.
- Llamadas o emails fraudulentos.
- Robo de datos de red.
- Búsqueda de vulnerabilidades.
Por esta razón, recomiendan tener en cuenta algunas recomendaciones para minimizar su riesgo:
- Evitar URL sospechosa.
- Confirmar que la web es segura
- Escanear enlaces con precaución.
- Nunca proporcionar datos privados ni contraseñas.