AXA ha anunciado el cierre de la primera fase de un nuevo fondo creado para impulsar infraestructuras que puedan soportar mejor situaciones adversas en países en desarrollo. Este fondo, llamado Infrastructure Resilience Development Fund (IRDF), está gestionado por Global Infrastructure Partners (GIP), empresa perteneciente a BlackRock, y es fruto del trabajo conjunto realizado durante los últimos dos años por varias compañías del Insurance Development Forum (IDF), entre ellas AXA, Convex, Generali, Scor, Swiss Re y Zurich.
El IRDF tiene como finalidad financiar proyectos de infraestructuras de pequeño y mediano tamaño en Latinoamérica, Asia y África. El objetivo es apoyar servicios básicos que son esenciales para las comunidades, como el suministro y la gestión del agua, la recogida y tratamiento de residuos, la energía, el transporte, los hospitales o la infraestructura digital.
En esta primera etapa, el fondo ha reunido 340 millones de dólares, con aportaciones tanto de la International Finance Corporation (IFC) como de las entidades del IDF que han participado en el diseño del proyecto. La captación de inversión continuará hasta 2026, con la intención de incorporar a nuevas aseguradoras e instituciones interesadas en contribuir al desarrollo de infraestructuras más resistentes en países emergentes.
Con esta iniciativa, AXA y el IDF muestran su compromiso con proyectos que ayuden a fortalecer servicios esenciales en regiones que afrontan importantes retos de desarrollo y resiliencia.
