Swiss Re mide en su último informe la resiliencia en función de la capacidad de una economía, empresa o hogar para resistir shocks financieros inesperados, como desastres naturales o la pérdida del sostén de la familia. El índice de resiliencia macroeconómica de Swiss Re evalúa cómo una economía puede resistir eventos como recesiones, mientras que los índices de resiliencia de seguros miden cómo los seguros contribuyen a mantener la estabilidad financiera de hogares y empresas, transfiriendo o absorbiendo riesgos clave.
Una de las principales conclusiones del informe es que la brecha de protección global alcanzó un nuevo máximo de $1.8 billones en 2022. Esto representa un aumento del 20% en comparación con la estimación de $1.5 billones en 2018. Según Swiss Re, alrededor del 43% del riesgo a nivel mundial no estaba protegido por activos o seguros en 2022, lo que refleja la necesidad urgente de fortalecer la capacidad de absorción de impactos.
El informe también destaca que la resiliencia macroeconómica mundial se fortaleció en 2022 debido a las tasas de interés más altas implementadas por los bancos centrales. Sin embargo, Swiss Re advierte que esta resiliencia aún se encuentra un 15% por debajo de los niveles de 2007, antes de la crisis financiera global. Además, la inflación persistente y otros riesgos continúan desafiando la estabilidad financiera.
En cuanto a la resiliencia en sectores específicos, el informe señala que alrededor del 60% de la producción mundial de cultivos asegurables no estaba protegida contra desastres naturales y accidentes en 2022. Además, aproximadamente el 75% del riesgo global no estaba protegido contra catástrofes naturales, especialmente en los mercados emergentes.
Si bien la resiliencia sanitaria mostró un aumento al llegar al 78% en 2022, la resiliencia a la mortalidad es baja, lo que indica que muchos hogares son vulnerables a la pérdida del sostén de la familia. La brecha de protección en términos de mortalidad alcanzó un récord de $406 mil millones en 2022.
El informe de Swiss Re subraya la necesidad de recargar la resiliencia mediante la reducción de las pérdidas esperadas y la ampliación de la cobertura de seguros. La inversión en la prevención de pérdidas y la transferencia de riesgos a través de seguros desempeñan un papel fundamental en la mejora de la resiliencia económica y financiera en un mundo cada vez más expuesto a riesgos imprevistos.
Jerome Haegeli, Economista Jefe del Grupo Swiss Re, enfatiza la importancia de abordar estas brechas de protección y aumentar la resiliencia económica y financiera a nivel global.
