El informe «Crédito y actividad aseguradora» de Mapfre Economics destaca la estrecha relación entre la evolución del crédito y el sector asegurador. El crédito estimula el consumo y la inversión, incrementando la demanda de seguros. Además, las pólizas de seguro actúan como garantía para los acreedores, fortaleciendo la estabilidad financiera.
El estudio analiza nueve economías de América, Asia y Europa, evaluando el crédito a gobiernos, hogares y empresas no financieras desde una perspectiva macroeconómica. Se observa una correlación significativa entre el crédito al sector privado no financiero y las primas de seguros, especialmente en mercados emergentes. Los ciclos crediticios influyen en sectores como vivienda, automoción y consumo, y aunque la expansión del crédito beneficia al sector asegurador, un crecimiento descontrolado puede derivar en crisis económicas.
El informe también aborda factores demográficos, como el envejecimiento de la población, que reduce la demanda de crédito debido a una menor propensión al riesgo y disminución en las tasas de ahorro de los hogares. La demanda de crédito sigue un ciclo de vida, alcanzando su punto máximo en los trabajadores jóvenes en edad productiva.